Jennifer Lawrence conoció al galerista neoyorquino Cooke Maroney, quien se convirtió en su marido y padre de su hijo Cy, en una cita a ciegas organizada por una amiga a mediados de 2018. La “celestina”, llamada Laura Simpson, le buscaba a la actriz “alguien desconocido y más alto que ella”, dado que Jen mide 1,75 m. Y acertó: el flechazo fue inmediato. Maroney, un hombre hasta entonces soltero y muy buen mozo, se desempeñaba como director y curador de una galería de arte en el Upper East Side de Nueva York, puesto que aún conserva.
Del “nunca me voy a casar” al altar
La primera cita (a ciegas para ella, porque él conocía a la famosa actriz por sus películas) fue en junio de 2018. Las salidas continuaron y apenas ocho meses después, en febrero del año siguiente, se comprometieron. Lawrence, que hasta entonces se había manifestado siempre en contra del matrimonio, contó en el podcast “Naked with Catt Sadler” que su pensamiento había cambiado. “Eso de que fuera ‘el hombre indicado’ siempre me había parecido realmente estúpido, pero él es ‘mi hombre indicado’. Es la persona más grandiosa que he conocido”, confesó. La actriz ganadora del Oscar agregó: “En cuanto conocí a Cooke, quería casarme con él. Es mi mejor amigo”.
La boda secreta y la llegada de Cy
A pesar de las expectativas de un gran evento al estilo Hollywood, la pareja optó por la privacidad. Se casaron en una ceremonia tan privada como secreta en una mansión histórica de Newport, Rhode Island, el 19 de octubre de 2019. El mes anterior ya se habían casado por civil en un Registro de Nueva York. A la fiesta asistieron 150 invitados, incluyendo celebridades como Adele, Emma Stone, Cameron Diaz y Kris Jenner. La actriz contó que disfrutó mucho del confinamiento con su marido durante la pandemia y, fruto de esa etapa, el 23 de febrero de 2022 nació su hijo Cy.
Ícono de estilo: el look de otoño que marca tendencia
Ahora, con su vida familiar consolidada, Lawrence ha retomado con todo su agenda profesional, demostrando que también es un ícono de la moda. Este año, la combinación de marrón y negro pasó de ser un error de la moda a ser el truco de estilismo más buscado, y Jennifer Lawrence es la última en adoptarlo. Ayer, la actriz combinó expertamente estos colores para un conjunto de otoño elegante y sofisticado de una de sus marcas favoritas, The Row. Llevaba un largo pulóver marrón chocolate y, para sumar más comodidad, usó un suéter haciendo juego sobre sus hombros. Dejó el pulóver por fuera de una pollera (o vestido) negra y suelta.
Los detalles del look y su rol como embajadora
Los tonos cálidos continuaron en sus accesorios: zapatos de cocodrilo marrón oscuro, una cartera tipo sobre (clutch) en tono óxido y anteojos de sol carey. Pero quizás lo más llamativo fueron sus joyas: aros colgantes de plata con perlas y piedras negras, un reloj Longines de plata en su muñeca y varias tobilleras de plata y oro. La actriz de “Los Juegos del Hambre” lució este inspirador atuendo para la apertura de la tienda Longines en SoHo, donde tuvo el honor de cortar la cinta azul. La ganadora del Oscar se unió a la marca de relojes suiza como “embajadora de la elegancia” en noviembre de 2022.